lunes, 18 de abril de 2016

Insurgente, de Robert Schwentke

Si ayer os hablaba de Divergente, hoy es el turno de Insurgente, la segunda parte de la trilogía cinematográfica basada en la serie de novelas de Verónica Roth. Os recuerdo que la tercera parte, Leal, está desde el 11 de abril en los cines.

Para esta segunda película el elenco es el mismo (con Shailene Woodley y Theo James como protagonistas), pero la dirección y el guión cambian de manos. En esta ocasión, Robert Schwentke se encarga de dirigir el filme. Veamos primero, como siempre, los datos técnicos:

Título: Insurgente
Título original: Insurgent
Director: Robert Schwentke
País: Estados Unidos
Productoras: Red Wagon Entertainment, Summit Entertainment y Mandeville Films
Duración: 119 minutos
Distribución: Summit Entertainment y Lionsgate

Después de todo lo acontecido en la primera parte de la saga, Divergente, Tris y Cuatro se encuentran en una situación peligrosa. El ambiente entre las cinco facciones es cada vez más tenso. Ahora Tris y Cuatro son fugitivos, perseguidos por la líder de Erudición, mientras que la facción de Abnegación ha desaparecido. Así, Tris y Cuatro buscan alianzas entre las otras facciones y fuera de ellas para luchar en una guerra que ya ha comenzado.

La verdad es que aunque parezca que la historia está más desarrollada que en la primera película, y aunque esta es más corta, no me ha enganchado tanto. No sé qué le pasa, quizá el ritmo no sea el adecuado. Es como si estuviera todo el rato en tensión, pero hasta el final de la película todo parece estático, algo así. Desde luego, Insurgente no me ha parecido tan activa y rápida como Divergente. Es, por el contrario, una película más lenta, donde la política cobra más protagonismo, así como la relación entre Tris y Cuatro.

Sin embargo, aunque esta película tenga menos acción (o eso es lo que me ha parecido a mí), tiene mucho más peso ético o de valores. O que se le da mucha más importancia a la psicología, especialmente a la de Tris, que en esta película, después de conocerla bien tras la primera, ya me cae bien, ya la comprendo y hasta siento cierto cariño y pena por ella.

En general me parece que la película es más floja que Divergente, pero tiene también mucho de lo que aprender, especialmente por el final y la carga psicológica y social que contiene. Ese es el punto fuerte que tiene.

Aquí os dejo el tráiler, bajo vuestra responsabilidad, porque a mi parecer desvela demasiado de la película. Vosotros veréis si queréis verlo.



Y como puntuación final, tres estrellas.


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