lunes, 17 de abril de 2017

El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, de Tim Burton

Aunque no haya hablado antes aquí sobre ninguna película de Tim Burton, debo decir que soy un auténtico fan de este director y productor californiano. Por ello, no podía evitar comentaros mi impresión sobre la última película (hasta la fecha) de este extravagante director.

Sin más dilación, sin más preámbulo, sin más anticipos, vayamos ya con la ficha técnica, como hacemos habitualmente:

Título: El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares
Título original: Miss Peregrine's Home for Peculiar Children
Director: Tim Burton
País: Estados Unidos
Productoras: Chernin Entertainment y Tim Burton Productions
Duración: 127 minutos
Distribución: 20th Century Fox

Como muchos sabréis, las películas de Tim Burton generalmente cuentan con dos posibles atmósferas: una oscura y fantasmagórica, tirando a gótica; y otra fantástica y colorida, cargada de tonalidades imposibles. En El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares creo que ambas atmósferas se unen haciendo de esta una película de lo más interesante. O quizá, más floja que otras.

Jacob (Asa Butterfield) es un chaval solitario, con pocos amigos, que pasa mucho tiempo con su abuelo. Su abuelo le cuenta historias sobre monstruos y sobre sus viajes, especialmente le habla sobre la casa de Miss Peregrine (Eva Green), una casa para niños peculiares en la que vivió hace muchos años. Allí, cada niño tenía una especie de poder especial (valga la redundancia). 

Misteriosamente, su abuelo muere, y Jacob acaba yendo a la isla donde, según su abuelo, estaba esta casa. Y, de pronto, se ve inmerso en un mundo que para él era totalmente desconocido, donde los niños y niñas peculiares tienen capacidades asombrosas y donde corren un gran peligro. Jacob tiene que ayudarles y protegerles, pues es lo que su abuelo querría, así que no duda en hacerlo (bueno, sí duda, la verdad es que es un miedica).

Lo que es la historia en sí, vale, está guay. Hay cosas chulas, no lo voy a negar. Pero, en sí, no es nada espectacular. La atmósfera, como dije antes, es algo desconcertante, porque mezcla la oscuridad de Pesadilla antes de Navidad con la fantasía visual de Alicia en el país de las maravillas, haciendo que no quede muy claro qué pretende.

Sin embargo, sí se ve en cada toma el toque mágico de Tim Burton como director de la película. Se le descubre, y gusta, aunque a veces no convenza. Es decir: no es un peliculón brillantísimo, pero sí es una buena película, cosa que no podía ser menos para este director.

Yo la he disfrutado mucho, aunque ha habido cosas que me disgustaban un poco, como el uso abusivo, sobre todo al final de la película, de los efectos especiales para generar personajes. No me convencían para nada, parecían más imágenes de videojuego que de película de cine.

Sin embargo, y en definitiva, la película merece la pena, obviando algunas cosas, y consigue transmitir esa esencia burtoniana y un mensaje siempre habitual en él de que otros mundos son posibles.

Aquí os dejo el tráiler:


Tiene, para mí, 4 estrellas.


¡Un saludo!

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